A los 16 años se inicia en Karate y otros sistemas, sin mayor implicación.
En el año 1990, recién cumplidos los 20 y por casualidad, conoce al que sería su principal maestro, Liu Zhenyuan, con el que inicia sus estudios de Taijiquan – Tai Chi Chuan, Qigong – Chi Kung y en general todo lo que el Maestro Liu enseñase en cada momento. El encuentro con el Maestro Liu le impacta fuertemente abriéndole los ojos a lo que significa la práctica de un arte marcial tradicional y los niveles superiores de habilidad. Desde entonces no ha dejado de entrenar, estudiar y aprender de múltiples profesores y maestros, pero sin abandonar nunca el sistema del Maestro Liu.
Al fallecimiento del Maestro Liu, conoce a otro de sus principales maestros, Aris Budiyarto, practicante de Pencak Silat (artes marciales de Indonesia). Con Aris accede a una serie de conocimientos técnicos y profesores sumamente interesantes, pero también, y mucho más importante, a tomar aun más consciencia de lo que significa pertenecer a una “familia marcial” y comprender que los límites están mucho más lejos de lo que uno piensa y que siempre hay mucho más de lo que se ve a simple vista.
En el año 2000, conoce a otro importantísimo maestro en su aprendizaje, Fernando Chedel. Con Fernando Chedel aprende de nuevo muchos elementos técnicos, pero sobre todo a como los diferentes elementos de un estilo deben de trabajar juntos, de forma que cada aspecto mejora todos los demás. Igualmente importante, es su entendimiento de como funciona el Taijiquan, los diferentes principios fundamentales y su increíble habilidad en el Tuishou, como muestra práctica del uso de estos principios.
En su primer encuentro, Antonio Leyva es testigo (y víctima) del “poder” de Fernando Chedel, rompiéndose en ese momento el estúpido mito sobre que el alto nivel solo es accesible a orientales, o que había secretos detrás de la habilidad superior fuera de comprender bien el entrenamiento de base y entrenar seriamente.
Otros maestros y profesores con los que ha entrenado durante periodos prolongados, de al menos más de tres años, han sido Pedro Valencia y sobre todo Lian Puwan, con el que estudia el estilo Chen de la linea de Lei Muni-Chen Fake.
Dos maestros, con los que no ha seguido estudios formales, pero que le impactan fuertemente en sus breves contactos son Chen Sheng Yu, del estilo Chen, y Lao Kim Hong, del estilo Zhengmanqing, influyendo de modo definitivo aspectos puntuales de su práctica.
Por último, desde el año 2015 y hasta el presente, aprende con Dan Harden y su método, Sangenkai. Dan es una extraña mezcla, por un lado un luchador nato capaz de hablar de tú a tú con casi cualquier luchador o maestro y que disfruta en el combate, por otro un excelente maestro, capaz de analizar cada aspecto de la práctica hasta límites insospechados y casi “microscópicos”. Su método de entrenamiento de habilidades internas, con la consecución de un cuerpo conectado como premisa fundamental, es en esencia “el mismo” que busca el Taijiquan (y totalmente compatible con el método de práctica del Maestro Liu), pero con un nivel de precisión excepcional en sus enseñanza y explicaciones.
Su conocimiento se origina fundamentalmente en los estilos Daito Ryu y Tenshin Shoden Katori Shinto Ryu en cuanto al desarrollo de habilidades internas y en la lucha libre y MMA en cuanto a la técnica y el uso en combate libre. Aunque su enseñanza se centra en los aspectos técnicos de uso del cuerpo y como conseguir la “conexión”, es evidente la influencia “práctica” de su gusto por el combate.
Antonio Leyva dirige la Escuela Liu Zhenyuan, que nace como homenaje al Maestro Liu sobre todo con el afán de conservar y difundir sus conocimientos y enseñanzas, de modo que al menos la parte que aprendió se conserve para que las futuras generaciones puedan disfrutarlas.